VOLKSWAGEN COUPÉ W12

35º Salón del Automóvil de Tokio

Volkswagen presenta, en el 35º Salón Internacional del Automóvil de Tokio, otra depurada muestra tecnológica dentro del segmento más alto. El Coupé W12 un prototipo con estándares muy cercanos a los que serían necesarios para una producción en serie, que incorpora un motor de 12 cilindros en W con 600 CV de potencia a un régimen máximo de 7.000 rpm. Adaptado para cumplir los requerimientos especiales de cada uno de los nuevos modelos, esta innovadora mecánica W12 se utilizará también en la berlina de lujo (D1) y en el todo terreno SUV (Sports Utility Vehicle).

Este motor de seis litros y doce cilindros se ha montado en el centro del prototipo, que tiene un peso en vacío de sólo 1.200 kg. El propulsor entrega una cifra de par máximo de 620 Nm, a 5.800 revoluciones. Con una velocidad punta superior a los 350 km/h, y una capacidad de acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 3,5 segundos, el Volkswagen Coupé W12 se convierte en uno de los vehículos deportivos más exclusivos y veloces del mundo.

Este prototipo es la tercera fase de evolución del proyecto W12, y ha sido diseñado para conseguir las más altas prestaciones y niveles de dinámica de conducción. El actual diseño de este superdeportivo, con su mecánica de doce cilindros en W inspirada en el mundo de la competición del motor, ha entrado de lleno en la etapa decisiva de desarrollo que se ha de llevar a cabo cunado se pretende crear un modelo preparado para producirse en pequeña serie.

En el futuro, todos los modelos Volkswagen de los segmentos superiores estarán equipados con motores en W con altas cifras de par. Esta configuración se caracteriza por ofrecer unos sus niveles muy reducidos de vibración y de acústica. Estas motorizaciones serán utilizadas, dependiendo del modelo, como mecánica estándar -como es el caso del Volkswagen Coupé W12- o como una opción.

La gama Volkswagen los incorporará en versión de ocho cilindros, como ya se puede ver en el Passat W8, o en versión de doce, con diversos niveles de potencia y de desarrollo. Volkswagen también ha desarrollado una versión de 16 cilindros que será utilizado a partir del 2003 en el Bugatti EB 16.4 Veyron, expuesto en su fase de desarrollo más reciente en el pasado Salón de Frankfurt.

El motor W12 es extremadamente compacto: tiene una longitud de 513 mm, una altura de 715 y un ancho de 710 mm. Con una cilindrada de 5.998 cc, su peso total es de 239 kg. El motor se sitúa entre el habitáculo y el eje trasero, con bancadas de aluminio de extraordinaria rigidez y camisas de cilindros de gran resistencia al desgaste. Otra muestra clara de la construcción ultraligera son las tapas de culatas y las carcasas de distribución moldeadas en magnesio.

La configuración básica del motor W12 se ha conseguido a través de dos módulos V6 muy estrechos con cuatro válvulas por cilindro, situados en ángulo de 72 grados, con un cigüeñal conjunto de siete cojinetes principales que confiere la disposición V-V o, lo que es igual, una W. El ángulo de los cilindros entre las dos bancadas V6 es de sólo 15 grados, lo que facilita una construcción muy compacta en comparación a los motores V12.

Todos los detalles de diseño mecánico del W12, que tienen una relación de compresión de 12:1 han sido elaborados con la máxima sofisticación tecnológica: las bujías están colocadas en la parte central de la cámara de combustión de techo pentagonal, lo que facilita una combustión de máxima eficacia. Lo mismo puede decirse de las lumbreras de admisión de flujo optimizado. Un colector de admisión variable de magnesio de doble flujo contribuye a proporcionar una curva de par particularmente dinámica. El sistema de admisión variable y el reglaje de distribución de las válvulas de escape tienen una influencia primordial para el desarrollo de la potencia: las levas de admisión tienen un ajuste continuo de 52 grados, mientras que el valor correspondiente a las de escape es de 22.

Tomando en cuenta la tecnología utilizada, no resulta extraño que se haya prestado una máxima atención al comportamiento de los materiales en la fase de desarrollo mecánico. En ese sentido, Volkswagen utiliza en este vehículo únicamente lubricantes de la gama Shell Helix.

El nivel de emisiones está perfectamente regulado. El motor W12 ha sido desarrollado de forma tal que supera los exigentes requisitos de la norma EU-4 a través de sus cuatro catalizadores de arranque y dos de tres vías en la versión para la producción en serie.

La enorme potencia del motor se transmite al eje posterior por medio de una caja de cambios secuencial de seis marchas, de gran agilidad de uso, situada inmediatamente detrás del motor, una disposición clásica y de gran eficacia en vehículos de carácter netamente deportivo. El VW Coupé W12 utiliza llantas de aleación especialmente diseñadas de 19 pulgadas de diámetro, con neumáticos delanteros de medida 255/35 ZR y posteriores de 275/40 ZR.

La sofisticación técnica de los ejes delantero y trasero, con sistema de suspensión por trapecio doble, los numerosos módulos electrónicos, una distribución de peso ideal de 50:50 y una amplia batalla de 2,63 metros aseguran al modelo velocidad y seguridad a partes iguales.

El conjunto de sistemas de seguridad activa incluye el sistema de control electrónico de estabilidad ESP y el control de tracción TCS. Las prestaciones de estos sistemas para la corrección de respuesta del vehículo en condiciones extremas se lleva a cabo no sólo a través del sistema de frenos, sino también por medio del sistema central de control de mecánica. Paralelamente, el bloqueo electrónico del diferencial EDS asegura a través de los frenos que las ruedas no patinen a velocidades inferiores a 40 km/h. Estos sistemas de seguridad activa puede ser desconectados por el conductor para realizar una conducción de máximo dinamismo en un circuito.

Los discos de freno son Brembo ventilados de 318 mm de diámetro, tanto en las ruedas frontales, como traseras. El freno de mano de activación eléctrica ha sido diseñado para una fácil integración en el sistema de producción en serie, ya que se activa sólo con un botón.

La carrocería alargada y plana de este coupé, con un alerón trasero contenido que se extiende automáticamente al superar los 120 km/h, deja claramente a la vista la incorporación de la tradicional elegancia de diseño de los vehículos Volkswagen al reducido segmento de los superdeportivos.

Por medio de la utilización de la construcción monocasco y la configuración de motor central longitudinal, el sector frontal del vehículo se ha podido mantener extremadamente plano. Con una longitud total de 4,55 metros y una anchura de 1,92, las líneas del prototipo son impresionantes, algo que queda subrayado por la altura total del biplaza, de sólo 1,10 metros.

El diseño inicial preparado por Giugiaro y su estudio Italdesign, uno de los más prestigiosos del mundo, ha sido refinado hasta llegar al prototipo actual, que se expone en Tokio: el nuevo estilo de las ópticas delanteras y posteriores reflejan con máximo vigor las características de diseño de los futuros modelos Volkswagen de la clase «premium».

El Volkswagen Coupé W12, pintado de color naranja efecto perla, tiene puertas tipo ala que abren hacia delante, y un techo con un sector central acristalado que se extiende desde el parabrisas hasta el límite posterior del compartimento del motor. El capó transparente permite ver la mecánica W12 en detalle desde el exterior. El modelo incorpora entradas de aire en cada uno de los laterales de la zona central, mientras que el motor «respira» a través de otras entradas de ventilación cercanas a la separación que divide el habitáculo y el vano motor.

El concepto interior del modelo incorpora materiales de calidad como el cuero, el aluminio y la fibra de carbono. Las butacas, accesorios y paneles de las puertas están acabados en ante gris y negro y cuero suave a juego. El volante también está forrado en cuero. Este elemento no es perfectamente redondo, sino que es similar, en forma y función, a los que se utilizan en los monoplazas de Fórmula 1.

Además de la utilización del cuero, los elementos de aluminio rojo del interior, muy llamativos, combinan perfectamente con el color exterior. Volkswagen ha utilizado un nuevo proceso químico que garantiza tanto la tonalidad como la uniformidad de acabado de las superficies que, curiosamente, no se encuentran pintadas.

La distribución de los instrumentos es clásica, con dos pantallas redondas que muestran la información más importante: la velocidad, régimen de marcha, nivel de gasolina (el depósito lleva 100 litros) y temperatura del motor. Las funciones del aire acondicionado, el sistema de navegación, el ordenador de a bordo y el teléfono se controlan por medio de un display de color en la consola central.

El concepto de habitabilidad interior está perfectamente logrado, con un espacio holgado y ergonómico para los dos pasajeros, con independencia de la cercanía con el suelo que caracteriza a todos los vehículos deportivos.

No cabe duda que el Volkswagen Coupé W12 representa mucho más que un simple estudio de diseño para ser expuesto en un salón del automóvil. Todos sus detalles son altamente funcionales, y el concepto general se encuentra muy cercano a los estándares requeridos para la producción en pequeña serie. El vehículo expuesto en el stand de Volkswagen en la capital japonesa, un verdadero pura sangre, ya ha establecido en pruebas realizadas en el circuito de Nardo, en Italia, nuevos récords, entre los que destaca el de distancia recorrida en 24 horas.

El pasado 14 de octubre un prototipo Volkswagen COUPÉ W12 estableció el récord mundial de velocidad en 24 horas. En el circuito italiano de alta velocidad de Nardo recorrió 7.085,7 kms a una velocidad media de 295,24 km/h. Mejoró el récord previo, que estaba en poder de un Chevrolet LTS Corvette en 12 kms.

El récord para 12 horas de recorrido ya había sido batido por el mismo vehículo en el transcurso de pruebas anteriores.

La carrera contra el reloj para probar el potencial y resistencia del vehículo comenzó a las 15.58 del día 13 de octubre.

El primer récord se batió sólo una hora más tarde, al completar ese lapso a una velocidad media de 310,99 km. El récord anterior estaba en poder de una Ferrari 550 Maranello, con 301,24 km/h.

Sólo 40 minutos más tarde se batía el segundo récord del Grupo A de la FIA, clase 2: 500 kilómetros recorrido a una media de 307,64 km/h.

Poco después de la puesta del sol se obtenía una nueva marca mundial; 500 millas recorridas a una velocidad media de 308,81 kms, con neumáticos Pirelli de serie.

Tras rodar exactamente 1.000 kilómetros, Volkswagen se adjudicó la marca para esa distancia, con una media de 311,09 km/h.

En el programa, el siguiente desafío en función del reglamento de la FIA, fue el punto de las 1.000 Millas, con 311, 51 km/h.

Con una velocidad media de 311,58 km/h, el Volkswagen COUPÉ W12 obtuvo también una nueva marca mundial para la distancia recorrida en 6 horas.

A las 08.53 del día 14 se superaba un nuevo listón: 5.000 km. a una media de 295,44 km/h.

Tras 7.085,7 kilómetros, el Dr. Martin Winterkorn, Miembro del Consejo de Dirección de Volkswagen AG, sacó la bandera para anunciar que se había batido el récord de 24 horas contra el reloj, la prueba de que el Volkswagen COUPÉ W12 había pasado su bautismo de fuego con las mejores calificaciones.

Pero la bandera de cuadros estaba acompañada de una señal que indicaba al piloto que siguiera su marcha. Tras una demostración de potencia tan palpable el Presidente de Volkswagen, el Dr. Ferdinand Piech, dio luz verde para que el proyecto «Nardo 2001» continuara.

El objetivo, el récord mundial sobre la distancia de 5.000 millas. Este último se obtuvo a las 19.32, con una velocidad media de 291, 87 km/h (la marca previa era de 279,69). El motor W12 de Volkswagen acababa de escribir su primer capítulo en el libro de la historia del automóvil.